Buscando un beso a medianoche: Una verdadera comedia romántica


Antes de empezar a desgranar, descarnar, despedazar o cómo queráis llamar a lo que hago aquí, me gustaría pedir disculpas (a mí mismo, me temo, pues creo ser el único que lee este blog) por no haber actualizado contenidos en un largo tiempo. Sé que estabais deseosos de leer una nueva crítica, pero me ha sido imposible (lo siento, Travis)

Dicho esto, empecemos. He de decir que es una de las películas que más gratamente me han sorprendido en bastante tiempo, un auténtico descubrimiento indie al estilo de Little Miss Sunshine (salvando las distancias). Al igual que aquél, es éste un film al que tradicionalmente llamaríamos comedia, ya que aunque en la sinopsis se trata como "comedia romántica", es evidente que el peso de la balanza se decanta más hacia el primer género que hacia el segundo.

El argumento es simple: un joven solitario y deprimido por una relación anterior que intenta encontrar un amor nuevo antes de que acabe al año, con la excusa del tradicional beso de medianoche de New Year's eve. Lo que no es simple, y lo que hace que se convierta en una pequeña gran película es, claramente, el guión y la interpretación. No quiero despechar a la puesta en escena, me parece magnífica; un ejemplo: la fotografía en ByN, que en ocasiones se interpreta como un hecho de pretenciosidad, se ajusta perfectamente a la historia. No haré un analisis misenscenico porque no es realmente importante, aunque huelga decir que todo está cuidado aunque se quiera dar la visión de que no es así.

Cuando se ha hablado de influencias (cosa normal en una película de un director novel), se han señalado principalmente dos: clerks y Manhattan. Sin que sirva de precedente, estoy completamente de acuerdo; de las dos toma el ByN (actualmente, más importante de lo que parece), pero esencialmente, está a caballo entre las dos. Como la película de Kevin Smith, hay aquí también chistes fáciles, rayando lo soez (aunque sin ser escatológicos). Igualmente, también es una cinta de muy bajo presupuesto y donde se ha rentabilizado lo máximo posible un guión mordaz y unos actores completamente desconocidos. De la película de Woody Allen nuestro debutante toma la casi perfecta construcción de los personajes a través de unos diálogos inteligentes, además de cierto aire romántico (rozando lo naïf en ocasiones) que la convierten en un film mítico.

Empero, no es una película perfecta, adolece de unas pocas secuencias un tanto artificiales o tópicas y de un final apresurado (aunque ciertamente realista). Aún así, un genial debut y una verdadera comedia romántica old school, que personalmente deseo que vuelva a revitalizar el género y haga olvidar esas completas gilipolleces protagonizadas por Jennifer López o Kate Hudson.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Post esquizofrénico donde los haya.

pepito piscinas dijo...

no conocía nada de esta peli, pero tomo nota para tenerla en cuenta la próxima vez que vaya al cine ;)

El Guardián de la fila 8 dijo...

Hola, Travis.
Muy guay la crítica. Tienes toda la razón:¡Basta ya de gilipolleces!
La comedia romántica es un género que se merece algo de dignidada, he dicho.
Pues si anda entre Clerks y Manhattan habrá que verla.
¡Cómo te gusta lo de hablar contigo mismo delante del espejo!
Un abrazo desde el No Mundo,
El Guardián