Dexter: Cómo identificarse con un asesino en serie

He decidido romper la botella de champán de este blog con una reseña sobre una serie que ejemplifica el trabajo bien hecho.

Primero, pongámonos en situación. Dexter es una serie producida por la productora/cadena de televisión Showtime. Partes de su trama y personajes están basados en las novelas homónimas de Jeff Lindsay, un autor no conocido, al menos por mi parte.
Básicamente, la trama argumental gira en torno a Dexter, un joven fiscal experto en hematología de la policía de Miami.

Hasta ahí, todo normal, estamos más que acostumbrados a series policiales-científicas del estilo CSI.

Lo que cambia en esta serie -y lo que hace que sea más atrayente para el espectador- es que la trama no está basada principalmente en los casos de asesinato que surgen en todo departamento policial, sino más bien en los asesinatos que el propio Dexter comete. Sí, el joven protagonista no es aquí el típico héroe policía que salva de la muerte a embarazadas indefensas, sino un meticuloso y sanguinario asesino en serie.

Pero, ¿Cómo lograr que la audiencia tenga una experiencia catártica con un personaje semejante?
Muy fácil, con el principio al que yo llamo Robin Hood. Este principio se basa en que la única manera de que el espectador/lector se identifique con un personaje moralmente deleznable es que las fechorías que comete vayan dirigidas hacia alguien de peor calaña. Hay quien pudiera ver aquí una oculta apología de la pena de muerte, pero este argumento es un poco retorcido.
La serie logra con ésto profundidad, porque los personajes que intervienen no forman parte de los "good guys" ni de los "bad guys", sino que se mueven en zonas moralmente grises, es decir, más como en la vida real.

Decía al principio de la entrada que se trata de una serie que pone de manifiesto el trabajo bien hecho. Éste es su principal fuerte, pues ya desde el propio argumento se intenta huir de los cánones de la ficción televisiva. Se trata de crear un ambiente, ponernos en la piel de un personaje con dos caras completamente distintas. Ésto lo consigue mediante tres aspectos magnánimamente empleados:
El primero de ellos es la gran interpretación del actor que hace de Dexter, Michael C. Hall. Aunque lo parezca, no es fácil interpretar a un personaje sin emociones, pero él lo consigue de una manera soberbia.
El segundo aspecto al que me refería es la voz en off, necesaria para establecer (en este caso) un vínculo díficil de crear entre espectador-personaje, como pasa por ejemplo en algunas películas de Scorsese.
Por último, ya en una vertiente un tanto más técnica, la creación del ambiente necesario también está lograda con la iluminación, uso de diferentes objetivos, con el empleo de filtros en determinadas escenas e incluso con una BSO bien escogida.

P.S. No caigáis en la tentación de ver esta serie en su versión doblada. No se trata de gafapastismo subtitulero, sino que la voz de nenaza que le han puesto a Dexter baja la credibilidad de la serie notablemente, además de hacer inútil el trabajo del actor protagonista.


2 comentarios:

El Guardián de la fila 8 dijo...

Hola, Travis.
Antes que nada, enhorabuena por el blog.
Este post sobre "Dexter" me ha encantado. Lo del principio Robin Hood es una observación muy acertada. Desde luego, si se cargara a gente "inocente" la cosa sería pelín más complicada (aunque quizás más interesante).
Los guiones de Dexter son un estupendo ejemplo de cómo hilvanar tramas y personajes de un modo que no chirrie nada y que dé más profundidad a los personajes. Sí, señor, una serie estupenda.
Mis respetos,
El Guardián de la fila 8

P.D.:Hay que ver cómo te cunden tus monólogos ante el espejo y lo bien que cuentas las cosas ;)

pepito piscinas dijo...

Muchas gracias por pasarte por mi blog. Cuando uno empieza siempre hace ilusión ver que alguien lo lee.

Estoy impresionada con tu blog, me encanta la distribución y las entradas son muy profundas. Me seguiré pasando ;)

En cuanto a Dexter, me parece una gran serie. Además ha sabido ir sacando nuevas tramas sin que se haga repetitiva, cosa que creí que al final no conseguiría.

Y totalmente de acuerdo en lo del terrible doblaje. Vi las dos primeras temporadas en VO y cuando oí el doblaje me pareció horrible, es como dices, una voz de nenaza, como si estuviera de chiste, sin ningún tipo de profundidad. Algo solo comparable con la voz que le han puesto a Ben en Lost.

En fin, lo dicho, gran serie.

Un saludo